Esta mañana nada más bajar a la recepción pedimos tarifa de un taxi para que nos llevara al Castillo de Mir y al Palacio de Niasvizh con el tiempo de espera incluido.
Nos salía un precio razonable pues las excursiones que hacen a los rusos no nos permitían ir porque según las agencias los guías no hablan inglés, pero nos ofrecían guía de habla inglesa por una cantidad exorbitante. Así que después del desayuno, salimos primero hacia Mir, a una hora y cuarto en coche desde Minsk.
Atravesamos campos de retama y bosques de alerces durante varios kilómetros por camino plano.
El castillo de Mir es una bonita edificación con cimientos del siglo XVI. Sirvió como prisión de los judíos y fue hospital militar en la 2a Guerra Mundial.
Ambos pertenecían a los Radzivill, una gran familia de nobles que a través de varias generaciones vivieron en los aposentos de dichos edificios.
Las habitaciones del castillo de Mir se encuentran decoradas con mobiliario de diferentes épocas y grandes artesonados en los techos.
Alrededor del castillo de Mir había un gran foso con agua y jardines.
El castillo de Nyasvizn se encuentra en un bello pueblo y su origen data de 1583.
Su fachada es imponente. Posee más de 30 habitaciones restauradas divididas en 3 plantas.
Hicimos el recorrido solos y la mayoria de gente que allí se encontraba hacían la visita guíada en grupo.
Particularmente me encantó ver las estancias de las princesas sutilmente decoradas en tonos pastel.
Destacaba también la sala de caza con decorada con osos disecados y otros animales.
Alrededores del castillo hay un gran parque con un lago. También vimos el monumento del soldado desconocido con una llama encendida en honor a los fallecidos en la II Guerra Mundial.
Ambos castillos son Patrimonio de la Humanidad desde el 2000 y 2007 respectivamente.
Qué bonito!!
ResponderEliminarMuy chulo.
Gracias Paco!
EliminarQue ganas de verlos!!!! Las entradas a los castillos más o menos cuánto costaban????
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