30 de agosto de 2013

KOSOVO: PRIZREN, CAPITAL CULTURAL


Fecha del viaje: Abril 2013
Extracto de Mi Diario de Viajes: 
  
Prizren es una de las perlas de Kosovo. Es una pequeña ciudad enclavada en un valle con un legado cultural importante y se encuentra alrededor del rio Lumbardhi con numerosas fuentes esparcidas por la ciudad.

Un viejo proverbio dice “El que una vez bebe agua de la fuente, le resultará difícil salir de Prizren”. Y a mi me recuerda a una pequeña Estambul situada entre montañas.



A pesar del dia lluvioso y nublado, no dudamos en acercarnos al centro histórico que se encuentra a cinco minutos desde el Hotel Residence. Vemos un edificio clásico de Información y Turismo y pedimos un mapa con los edificios y monumentos más importantes del casco antiguo. Justo detrás se encuentra una noria de agua. 



Caminando unos metros más adelante vemos el famoso puente de piedra que es uno de los más llamativos de los que conectan con la ciudad vieja, pues data de la época del Imperio Otomano. Recientemente fue restaurado en su totalidad debido a las inundaciones en 1982.  





Nos dirigimos hacia el barrio de Shaterman que es el núcleo más importante del centro histórico con su plaza, sus casas de colores y sus cafés y restaurantes, siendo este el centro de reunión de sus habitantes. 




Muy cerca nos topamos con las mezquitas de Sinan Pasha  del siglo XVIII y Emin Pasha, que data del siglo XV.




Más hacia el sur se encuentran los baños turcos, el Gazi Mehmet Pasha, un edificio precioso pero cerrado por su restauración en el interior. También encontramos cerrada y apuntalada por los cuatro costados la Mezquita del Viernes.


En la Iglesia de San Jorge no piden los guardas de la entrada el pasaporte, pues las iglesias ortodoxas en esta zona se encuentras resguardadas policías de Kosovo, para evitar el vandalismo. Antes eran los del Kfor ( Kosovo Force, es el ejercito que puso la Otan para controlar el país). Queda terminantemente prohibido hacer fotos dentro.




También vemos muchos comercios pequeños donde se venden frutos secos, café, trajes de novia, joyería y puestos de Burek, el típico tentempié de los Balcanes, que es una especie de torta redonda de pasta filo rellena de queso o carne. Se toma acompañado de yogurt líquido.



Se pone a llover y nos resguardamos en uno de los puestos de Burek para degustar uno de carne.Cuando deja de llover subimos hacia la fortaleza pues desde abajo se ve imponente. Un pequeño camino nos lleva en pocos minutos hacia el castillo.



El fuerte es considerado uno de los monumentos principales de Prizren. Se utilizó como fortificación militar hasta 1912. El castillo domina toda la ciudad y las vistas son espectaculares pues comienza a salir el sol.

15 de agosto de 2013

SERBIA: EL BARRIO TURCO DE NOVI PAZAR Y EL MONASTERIO DE SOPOÇANI

Fecha del viaje: Abril 2013
Extracto de Mi Diario de Viajes:

El sonido del muecín nos despierta en mitad de la noche, pero después de descansar un poco más en el Hostel Khan, con habitaciones de minúsculas camas aunque limpias y baratas, nos acercamos a la zona turca de la ciudad donde se encuentra el bazar y las mezquitas.

Optamos por desayunar en el café Sherezade, un local de gente joven donde toman café y fuman. A pesar del humo, entramos y desayunamos yogourt de fresones, cerezas y moras, acompañado de un café turco. Nos lo traen en un recipiente típico. Dentro del azucarero hay dos delicias turcas.



Las casas son pequeñas conservando los antiguos tejados y donde albergan las tiendas de los comerciantes.  Novi Pazar significa “nuevo bazar” y la mayoría de sus habitantes son musulmanes. Es una ciudad fronteriza con Kosovo y Montenegro.

 Compramos en una panaderia un pequeño pan relleno de frutos secos y los panaderos nos dejan entrar para ver como fabrican el pan y otras pastas.


Recorremos el bazar y hacemos algunas fotos de la gente que se encuentra desayunando, fácilmente posan para nosotros regalándonos sonrisas.


Hoy visitaremos el Monasterio de Sopoçani, que se encuentra a unos quince kilómetros de Novi Pazar. Negociamos el precio con un taxista y salimos en ruta. 









El trayecto con el taxista se hace ameno pues nos explica que Serbia considera esta parte del sur como la zona de los turcos, pues al ser musulmanes los tienen discriminados. Ellos no se sienten culpables de de que el Imperio Otomano ocupara esta zona de Serbia en su totalidad hasta principios del siglo XX y que cuando ya pudieron liberarse, ya existía esta influencia turca en el sur. Opina que Serbia se ha quedado relegada y empobrecida, que ha perdido al separarse los demás países.El paisaje por el valle es espléndido, nos acompañan verdes montañas durante un trayecto de unos veinte minutos.

Nos encontramos de repente con este bello edificio, del siglo XIII  que fue destruido por los turcos a finaldes del siglo XVII. Más tarde fue restaurando en 1920. El monasterio se encuentra ubicado en lo alto de un montículo. Forma parte del Patrimonio de la Humanidad pues conserva unos maravillosos frescos en muy buen estado.




Después de esperar un buen rato, entramos en un edificio contiguo donde un pope (sacerdote de la iglesia ortodoxa) nos trae la llave para poder entrar, pues este se encuentra cerrado. Nos acompaña a la entrada principal el monasterio y  nos abre la puerta, esperando en la entrada.


Dentro podemos admirar esos frescos tan bellos y que aun conservan los colores tan vivos como hace más de ocho siglos.  Destaca la Asunción de la Madre de Dios y el retrato de San Philippus, por su misteriosa mirada  que al contemplarlo parece que te sigue con sus ojos.

Después de poder hacer alguna fotografía con permiso del pope, damos un pequeño donativo y las gracias en serbio, por lo que el pope nos responde con un “bye”.

10 de agosto de 2013

SERBIA: LA FORTALEZA DE NOVI SAD SOBRE EL DANUBIO.

Fecha del viaje: Abril 2013
Extracto de Mi Diario de Viajes:

Siempre pense que viajar a los Balcanes (aparte de visitar esas pequeñas joyas escondidas) me ayudaría a entender mejor la historia, la cultura y los numerosos conflictos de la antigua Yugoslavia.Empezamos el viaje por Serbia aterrizando en el aeropuerto de Belgrado.


Nuestro destino es Novi-Sad, asi que una vez en la capital, tomamos el autobús que en hora y media nos deja en esta bella ciudad, aunque salimos un poco intoxicados por los cigarrillos que se fumó el conductor y el calor de la calefacción.


Andamos los dos kilómetros que nos lleva al centro atravesando el Boulevard Oslobodenja. Cruzamos un mercado al aire libre de frutas,verduras carne y pescado.En la calle hay una gran animación pues a pesar de ser Semana Santa, la religión ortodoxa la celebra una semana más tarde.


Llegamos a la Trg.Slovode (o Plaza de la Libertad) en el centro histórico, donde se encuentra nuestro alojamiento, el hotel Vojvodina, haciendo referencia a la región donde nos encontramos, con influencia húngara debido a su situación geográfica, pues unos pocos kilómetros al norte se encuentra la frontera con Hungría.


El casco antiguo se encuentra repleto de edificios históricos muchos de ellos pintados con colores alegres, al fondo vemos el ayuntamiento, el Vojvodjanska Bank, el palacio Tanurdzic, la Iglesia católica de Maria, incluso iglesias ortodoxas y una de estilo austríaco-católica, presidiendo la plaza. Hay muchos cafés con terrazas que invitaría a sentarse y ver la gente pasar si no fuera porque hace un poco de frío.


Cenamos en el restaurante Kod Lipa, es una antigua casa que data de 1880. Pedimos unos mezze  y çevapccici con queso típico del país, el kajmak, que más bien parece una bola de leche frita por su espesura. Acompañamos con un vino serbio de la región.


... Hoy por la mañana visitamos la ciudadela de Petrovaradin, una inmensa fortaleza que construyeron los austro-húngaros para defenderse de los turcos.


Se tardó 88 años en hacerla y en ella perdieron la vida más de 80 esclavos  (eran asesinos y ladrones)  para ganarse el purgatorio.



Petrovaradin significa "la fortaleza tan fuerte como la fe". El joven Tito fue prisionero en esta ciudadela. Desde lo alto de la torre se divisan unas bellas vistas sobre el Danubio en su parte derecha con la ciudad vieja y al otro lado se encuentra la ciudad nueva.



En la misma torre donde me encuentro hay un enorme reloj que construyeron los austríacos y en aquella época se debía pagar una tasa para las casas que podían divisar la hora, que era la gran mayoría.


Salimos por una de las entradas posteriores y nos vamos a una de las paradas de autobús que van hacia el Parque Nacional de Fruska Gora, aunque el conductor nos dice en su idioma que este no es el autobús que tenemos que coger y nos deja en la parada correcta a unos cientos de metros más adelante. Le damos las gracias sin tener que pagar el billete. El paisaje a medida que avanza es un bosque frondoso.


Una vez en Fruska Gora, visitamos uno de los monasterios más importantes de Serbia, el Novo Hopovo. Su origen data del año 1575 y fue fundado por el Obispo Maksim.


La entrada es gratuita  y el pope nos abre el monasterio para poder admirar los bellos frescos en su interior, que son de influencia griega y fueron pintores de la misma escuela que pintaron en el monasterio del Monte Athos. Nos deja tomar unas  fotografías y dejamos una propina para el mantenimiento.


En Fruska Gora hay más de 30 monasterios esparcidos por la montaña, pero sólo 17 de ellos permanecen en activo actualmente...