28 de febrero de 2023

ECUADOR : LA LAGUNA DE QUILOTOA Y LA FIESTA DE LA MAMA NEGRA

 

El autobús nos dejó en medio de la carretera de la Panamericana  y desde allí tomamos un taxi para llegar al hotel Makroz en Lacatunga, muy próximo al centro histórico de la ciudad.



En la plaza principal se alzaba la hermosa Catedral blanca que se construyó en la época colonial y que en 1768 resultó destruída por un terremoto. 



Cerca se encontraba el edificio de la Gobernación  de Cotopaxi y entramos en el edificio del Ayuntamiento para ver su patio central en forma de claustro y los dos frescos que nos llevaban a la segunda planta.




Saliendo fuimos a ver una casa histórica de 300 años ubicado en el Parque Vicente León y propiedad de los señores Luis Eduardo Tovar y su esposa Rosita Almeida Naranjo. Allá por el año1692 la dueña vendió la primera y segunda planta que colindaban a un templo jesuita.




Paseamos por una serie de porticones que daban a la gran plaza, el Pasaje Catedral le llamaban, con tenderetes de chuches, helados peculiares, comida y puestos de limpiabotas.



Visitamos la casa-museo de los Marqueses de Miraflores donde había una exposición de la fiesta de la Mamá Negra que se celebra cada 24 de septiembre desde el año 1964. Los negros que la acompañan van con vestimenta vistosa y colorida y ésta recorre a caballo de su hija María Mercedes, compartiendo sopleta  junto a los palafreneros y” sus negritos”. 




En el museo había una colección de arte sacro y dos patios interiores donde hablamos con la señorita que vigilaba la sala. Estaba orgullosa del legado español y nos decía que una vez tuvo un novio catalán con el que estuvo a punto de irse a vivir a España pero que al final no pudo ser.  



Vimos en el mercado un  gran mural representando a la "Madre Negra" y su hija Mercedes. En la fiesta van con máscaras y elementos decorativos de gran cromatismo. El personaje  en  cuestión,  una mujer negra robusta, podría representar a los esclavos cautivos en el mundo que  fueron  liberados  por  los Mercedarios por iniciativa de San Pedro Nolasco. En  ese día de gran festividad,  la ciudad de Latacumba se llena de vida con el desfile de los personajes y el colorido de los trajes.





El mercado se encontraba ya cerrando y ya era hora para ir cenar por lo que nos fuimos a un restaurante mexicano que nos transportó a ese lindo país con su decoración y gastronomía.



Al día siguiente fuimos con un taxista que contratamos para ir a la Laguna de Quilotoa. Pasamos a través de bellos paisajes a una altitud de unos 3000 mts. A esta zona le llamabann El Páramo porque conviven un conjunto de pueblos denominados Comunidades de los Kichwa.



Segundo, nuestro chófer nos paró en el Cañón de Tuachi, un desfiladero donde hace unos 800 años el volcán Quilotoa erupcionó y arrastró toda la lava hacia el valle y al no encontrar salida desmontó el suelo creando una fisura enorme.



La comunidad Kichwa te cobra 1usd por la vista, lo cual no me parece mal. Cuando llegamos a la Comunidad de Quilotoa a una altura de  3900 mts s.n.m., pagamos 2 usd para entrar y dejamos el vehículo aparcado.



Nos fuimos hacia el mirador de inmediato para ver el impresionante cráter que se encontraba a 3500 mts de altitud.  La laguna era de un azul intenso y el agua que contenía era de lluvia. Tenía unos 250 mts. de fondo pero con el tiempo el agua se fue evaporando aunque debido a la lluvia se ha ido manteniendo.



Emprendimos la bajada casi en picado de los 400 mts. y por camino de cabras. Poco a poco llegamos zigzagueando. Una andina con su traje típico y su alpaca engalanada se encontraba allí, lugar idóneo para poder hacernos una foto y colaborar con la comunidad kichwa.




Una vez abajo nos pareció un lugar bello para quedarse un buen rato aunque no impresionara tanto. Había alguna mesa de picnic y asientos contemplar el paisaje. 



Cuando emprendimos la subida empezaba a lloviznar y pedimos unas mulas pues eran fuertes y resistentes para que nos llevaran de vuelta pues según los expertos, la subida era más difícil que la del Chimborazo.



Cuando llegamos arriba, nos fuimos a comer a uno de los restaurantes del poblado donde ofrecían un menú típico de locro que era una sopa hecha con dos tipos de patata, acompañado de maíz tostado, aguacate y queso salado.  Delicioso.



Fue una bonita jornada la que pasamos junto a la naturaleza con gentes humildes y hospitalarias, como suele acontecer por estos lares. 

25 de febrero de 2023

ECUADOR : LA RUTA DE LAS CASCADAS EN BAÑOS

 

Baños de Agua Santa era un lugar vacacional donde los lugareños se acercaban en fin de semana para disfrutar de sus paisajes y de los baños termales.



Nos alojamos en el Hotel Colonial en el mismo centro y una vez realizado el check-in nos fuimos a ver los tours que se ofrecían para aprovechar la tarde. Fuimos con chiva hacia el mirador del Volcán Tungurahua que en kichwa significa “ trono de fuego”.



Allá por el año 1999 el volcán explosionó donde fallecieron unas 2400 personas. Subiendo la montaña paramos con la chiva en el Nido del Águila donde uno puede tomarse una fotografía con el volcán de fondo sentado en las manos de esta popular estatua.



Hicimos una segunda parada en “los pies de Dios” donde había un columpio y unas manos blancas con un corazón. 



Seguimos con la guagua subiendo por una carretera vertiginosa con la música a tope y la gente cantando alegremente. A medida que pasaba la tarde, el volcán se encontraba casi  tapado pero no nos importó porque nos lo pasamos genial.



Al día siguiente después del desayuno hicimos la ruta de las cascadas. Esta vez la chiva llevaba el nombre de “Pailón Travel” e iba con 32 personas. Primero llegamos a la presa de Agoyán pasando por una carretera de túneles que iba hacia las Cascadas de la Culebrilla y la Esperanza mojándonos al pasar.



Seguimos hasta el puente de cristal y paramos para quien quería hacer actividades de canopy, ovni, el bolaloca... Nos contentamos con admirar el paisaje. Desde aquí se veía una bella vista de la cascada “Velo de Novia” y del río Pastaza.





Seguimos con la chiva hacia la fábrica de licor de guayaba donde hicimos una degustación de membrillo y compramos unos frutos secos. 



Seguimos recorriendo el camino hacia la Tarabita comunitaria de San Pedro donde nos bajamos y montamos por grupos de ocho personas en una cesta oscilante que iba bastante rápida atravesando la montaña junto al Parque Nacional Sangay. Había una fabulosa panorámica de la Cascada de San Pedro.



Seguimos con la chiva hasta la gran cascada llamada Pailón del Diablo. Caminando unos veinte minutos y atravesando un puente colgante de 120 metros de largo. 




Fuimos bajando por escaleras de piedra donde se iba apreciando esta maravillosa cascada.  La vista era sensacional con una caída de ochenta metros donde te podías mojarte fácilmente por la proximidad del agua.




Volviendo hacia Baños nos fuimos a comer al restaurante “La cocina de Dulcelina” y al hotel a descansar un rato.



Por la tarde fuimos andando hasta la “Cascada de la Virgen de  Agua Santa”, un lugar relajante. 



Justo al lado se encontraban los baños termales de la Virgen, pero había tanta gente que desistimos y nos fuimos a visitar la Basílica y Convento de Ntra. Sra. Del Rosario y vimos su precioso claustro.



Afuera había pequeños puestos de golosinas. Desde aquí fuimos caminando hacia el Café Ricopan para tomar un canelazo con aguardiente y nos tomamos los frutos secos que compramos por la mañana en la fábrica de licor.   


23 de febrero de 2023

ECUADOR : UNA INCURSIÓN EN LA AMAZONIA DESDE TENA

 

Alojados en el Hostal Pakay de Tena nos fuimos a la agencia Raft Amazonia para contratar las excursiones durante los dos próximos días y navegar por el río Napo junto con otras actividades. Al mediodía nos fuimos a visitar el Parque de la Isla y bañarnos en la Laguna Azul.



El Parque de la Isla se visitaba con un guía que nos acompañaba haciendo un recorrido a través de un sendero y con machete en mano nos iba explicando el tipo de plantas de la Amazonia.

 


Cada árbol o planta tenía un uso medicinal, por ejemplo la sangre de árbol era un tipo de mercromina, la pata de vaca era una hoja en forma de pezuña y servía para bajar el colesterol e hipertensión, una hoja con olor a canela, el fruto del cacao, las hojas donde beben los colibríes porque en sus agujeros almacenaban agua, una ceibá de 200 años y así sucesivamente.




Después nos fuimos con un taxi a  la Laguna Azul aunque estaba empezando a llover fuerte quisimos verlas. Lo llevaba una comunidad kichwa que protege la zona de la laguna y donde tenían puestos de comida y bebida.



Era un balneario natural, el Waysa Yacu dentro del río Jatún Yacu. Había varias piscinas naturales en un entorno salvaje. Era un lugar de recreo para los ecuatorianos de fin de semana. Como empezaba a llover fuertemente nos refugiamos en uno de los miradores a esperar que aflojara la lluvia.




Las corrientes eran peligrosas y las aguas estaban revueltas así que cuando dejó de llover paseamos por el entorno y nos quedamos a comer la tilapia típica con yuca y guayusa, una bebida fresca de hojas naturales de la amazonia es lo que los indígenas nos recomendaron.





Al día siguiente nos fuimos con José, el guía kichwa que nos acompañaría durante la jornada. Llegando a Puerto Humano tomamos la canoa con motor y recorrimos un largo trayecto hasta llegar al Centro de Rescate de Animales Amazónico. 




Era un centro que funcionaba desde hace 30 años y que funciona a base de donaciones pues no reciben ninguna subvención del gobierno. Había voluntarios que trabajaban durante dos meses.




Vimos monos, tortugas, cotorras, loros, tapires, tucanes y una boa pues vivían en el centro de la que un 50% se liberan y los otros no ya que proceden del comercio ilegal y no se adaptarían a la selva. Cada animal llevaba una triste historia detrás.




Seguimos con la canoa a través del río Napo y nos paramos a ver una ceibá de 8oo años. Seguimos el trayecto para hacer tubing y finalmente llegamos a la isla Caimán donde visitamos una comunidad Kichwa y aquí nos enseñaron el proceso del tostado del cacao y su elaboración mezclado de infusión de limón y canela después del molido acompañándolo con fresas y plátano.




Después elaboraron la chicha con yuca fermentada y nos dejaron jugar con las cerbatanas para disparar a un buho de madera y tocamos los tambores que iban forrados de piel de mono. Nos acompañaba una chica de Madrid muy maja.



Para finalizar fuimos a ver la laguna de los caimanes que aparecieron enseguida cuando José les lanzaba carne.  Una vez finalizada la excursión volvimos a Puerto Humano a comer y regresar hacia Tena.