Salimos temprano dirección Mosul, son 5 horas de viaje así que creo que es el más largo que hemos hecho en todo Irak Federal. Adil nos pone música para amenizar la mañana, es música árabe, farsi y marroquí.
Nuestro guía es un árabe atípico, muy moderno, a pesar de que se casó por mediación de un matrimonio concertado con su mujer porque a día de hoy ocurre en algunas familias.
Una vez casados éste le dijo a su mujer que debía ser una persona independiente, ella se hizo maestra y tuvieron dos hijas sin tener que sentirse obligados a buscar el niño. Aquí la tradición requiere tener un niño por lo menos, porque en los clanes familiares le dan más valor que a las niñas ya que éstas apenas cuentan.
Además él no es musulmán ya que no comparte las ideas de la religión, es agnóstico. Dice que sabe muy bien disimularlo para no tener problemas.
Pasamos toda la jornada en carretera y una vez llegamos al Modern Palace Hotel, pedimos la habitación y nos hacen descuento de 5 dólares por conocer al guía oficial del hotel, el que nos ha recomendado Adil, así todos contentos. Nos invitan a un té y nos despedimos deseándole una muy feliz vida.
Después nos damos una vuelta por el gran bazar y nos sorprende lo animado que se encuentra con tiendas de todo tipo: de frutos secos, jabones halva, cafés, tés, aluminio, cobre, teteras y cafeteras... junto con ropa y otros utensilios.
Parece que nada haya sucedido aquí pues hay una gran esperanza en la gente por mejorar la ciudad tras las guerras.
Fuimos al mercado de pescado donde había grandes piezas del río Eúfrates. Junto a los tenderetes se encuentran las tascas donde frien el pescado tal cual va llegando la clientela.
Nos gusta ver el ambiente que hay y la gente nos saluda y nos preguntan de dónde somos, al oír que somos de Barcelona les encanta aunque alguno nos dice que es del Real Madrid ya que en el Estado Federal la mayoría es simpatizante del equipo blanco.
Damos una vuelta por el casco antiguo de Mosul y aunque ya lo esperábamos, verlo totalmente arrasado, impresiona.
Este es el resultado del grupo terrorista que formó el Estado islámico, el ISIS se hizo con el control de la ciudad y destrozó las clases de la parte antigua de de la de Mosul matando a 50000 personas y 12000 desaparecidos que este grupo terrorista probablemente asesinó.
Toda la población estaba sometida al grupo, tenían que seguir sus órdenes o te jugabas la vida.
Es más, torturaron y adoctrinaron personas y niños para hacerse del ISIS. Incluso la gente que permanecía en sus casas entraban y les rompían todo o los mataban y los que salían directamente los asesinaban. Algo terrible que no puede volver a suceder.
Los grupos militares que estaban en aquella época al mando en transición después de la Guerra del Golfo, huyeron cuando se vieron atacados por el ISIS y dejaron sin defensa la ciudad de Mosul, a manos de la gente de peor calaña.
Después de tres años de asesinatos y destrozos, los mismos vecinos de la ciudad, una vez terminada la guerra se pusieron a limpiar y barrer las calles sin ayuda de nadie, por lo que estos ciudadanos de Mosul, merecen un respeto y ser escuchados para que la historia sea contada.
Cruzamos el puente de vuelta donde se ve iluminada una mezquita que hizo construir Sadam Hussein y que más tarde fue derruida como tantas mezquitas de la ciudad. Ahora se está reconstruyendo pero se puede visitar.
Al llegar al hotel, contactamos con Saif, el guía oficial para que nos lleve mañana a Hatra y Asur. Incluso nos ha comprado las entradas con antelación pues se consiguen en la Casa de Cultura pero hoy por la tarde se encontraba cerrada y él las había comprado antes.
Saif nos quiere enseñar esta noche el centro de Mosul, está orgulloso de su ciudad y colabora en la sección cultural, así que nos viene a buscar.
Nos lleva primero al Mosul Heritage Museum donde podemos ver las vestimentas típicas de las diferentes etnias de Irak, así como abalorios, armas, utensilios para el aseo, el café y té... etcétera.
También entramos con él en la Casa de la Cultura, nos enseña en una de las salas un gran boquete que dejaron en el techo como parte de la historia.
Nos enseña la mezquita de Al Nuri que está ya acabándose y que en 4 días dice la inauguran por lo que me mandará una foto una vez hayan colocado la parte final y quitado los andamios.
Paseamos por la ciudad y vemos a los locales tomar el típico chai mientras charlan animadamente entre ellos.
Como es hora de cenar Saif nos lleva a un restaurante típico para tomar koffka y oruj.
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